La pelota no se mancha

Nos encontramos en pleno auge mundialista, La pasión por el deporte nacional contagia aún a quienes no son afectos al fútbol. Los colores de nuestra bandera decoran casas, balcones, escuelas, comercios y nuestros corazones. Suena el himno y todos frente al televisor esperamos ansiosos que comience la partida. Ese clima de unión y festividad no siempre fue compartido por todos. Hace varios años ya, 40 para ser exactos, nuestro país era anfitrión y organizador de la Copa del Mundo. Ese año, 1978, vociferando "Argentina", "Argentina" llegamos a la final y salimos campeones. Pero los gritos de gol no fueron los únicos gritos que se escucharon en ese momento.

Durante la semana se desarrolló el taller La pelota no se mancha. Mundial, Literatura e Historia. Durante los diferentes encuentros, se pudo trabajar la utilización que la última dictadura Cívico Militar argentina hizo de dicha Copa del Mundo. De esta manera, a través de análisis de material audiovisual, cuentos y fuentes históricas primarias se buscó que los chicos analizaran críticamente una de las etapas más oscuras de nuestro país. Así, el objetivo general del taller fue fortalecer el pensamiento crítico de los estudiantes e incentivarlos a formarse como ciudadanos comprometidos con la realidad pasada y presente. Como evaluación final del taller, los estudiantes realizaron producciones propias que fueron expuestas en la escuela.