Día del Respeto a la Diversidad Cultural
“Hoy no es un día para celebrar, sino para reflexionar”
Con esa frase comenzó el acto la profesora María Inés Olmos.
El pasado 12 de octubre se conmemoró, como todos los años, el día del respeto por la diversidad cultural. Hace un tiempo celebrábamos la llegada de Europa a América, luego comprendimos que aquel hecho no era ninguna celebración.
Dentro del acto de Pompeya, presentaron un video hecho por 1er año y coordinado por Eugenia Gregorini, el cual mostraba un claro mensaje, “No a la discriminación”. Siguiendo en la misma temática, se presentaron textos de Eduardo Galeano y una concisa explicación al emblema Wiphala.
A menudo, escuchamos sobre el genocidio cometido en el siglo XV, pero... ¿le damos la debida atención?
El europeo, con aires de grandeza, trató a los pueblos originarios de “bárbaros”y a causa de eso mató, esclavizó, violó y rompió muchas culturas. No fue un simple proceso más en la historia, en realidad marcó un antes y un después en nuestra historia. Para los indígenas, el 12 de octubre, se marca en su calendario como “el último día de libertad”
Convocamos a rememorar las palabras de los ancianos: “…que se sepa la verdad, la terrible verdad de cómo mataron y esclavizaron a un continente entero, para saquear la plata y el oro y la tierra. De cómo nos quitaron hasta las lenguas, el idioma y cambiaron nuestros dioses atemorizándonos con horribles castigos, como si pudiera haber castigo mayor que el de haberlos confundido con nuestro propios dioses y dejar que entraran en nuestra casa y templos y valles y montañas. Pero no nos han vencido: hoy, al igual que ayer, todavía peleamos por nuestra libertad”
Debemos conmemorar, recuperar y hacer presente la memoria y la vida de los pueblos originarios que desde 1492 están luchando en defensa de sus territorios, sus identidades, sus dioses, sus idiomas y sus bienes naturales que hoy son sistemáticamente arrasados.
“El gran reto hoy, más que establecer la verdad histórica de lo ocurrido (tarea que no debe abandonarse), es combatir las brechas sociales que, lastimosamente, siguen separando a los herederos de esa historia común.”